Cumpliendo o excediendo los parámetros de la normativa N95 (NIOSH-42CFR84) y con certificación CE, el respirador KN95 hecho de acuerdo a la norma GB2626-2006 para proteger a los profesionales de la salud de forma efectiva contra aerosoles y fluidos corporales, reduciendo de forma significativa el riesgo de contagio por enfermedades de transmisión aérea. 

Reduce también todos los riesgos asociados a contaminantes ambientales con tamaños de partícula superiores a 0.3 µm como polvo, polen y esporas. El respirador ha probado su eficacia y fue diseñado a partir de la experiencia de la epidemia del SARS 2002 para mejorar su desempeño ante aerosoles infecciosos