En la conferencia “2021 Update on Sterilization Best Practices” presentada por Susan Klacik y Erin Kyle se retomó el énfasis en la importancia de la limpieza como la fase primordial en el proceso de esterilización ya que, si bien se cuenta con tecnología cada vez más eficaz para la esterilización o desinfección, está solo es posible cuando hay una limpieza correcta. Los sistemas de desinfección por luz UV o por peróxido de hidrógeno vaporizado representan una enorme ventaja en el tratamiento de los espacios hospitalarios, especialmente en el quirófano, pero requieren también de una limpieza correcta que incluya el uso de detergentes adecuados y su desinfección. Dicha limpieza debe incluir espacios, cómo el Quirófano pero también la Central de Esterilización (CEyE) que es fundamental para asegurar la esterilidad del proceso. Esto incluye una evaluación de las cargas de trabajo y riesgos de las diferentes áreas y superficies, para establecer los protocolos de limpieza adecuados a cada caso para ejecutarlos de forma efectiva.
Otro de los temas señalados fue el reuso de los dispositivos médicos de un solo uso, que siguen siendo reutilizados con frecuencia. En esos casos, se recomienda definir protocolos para establecer el máximo reuso probado y seguro para los pacientes. Por otro lado, los pacientes deben ser informados y dar su consentimiento informado sobre el uso y las condiciones en las que se encuentra. Dicho consentimiento se puede elaborar en formatos ya establecidos por la FDA y pueden ser descargados en su página web.
En el caso de los instrumentos reprocesables hay que remarcar la importancia de contar con las instrucciones de procesamiento del fabricante o IFUs por sus siglas en inglés (Instructions for use) ya que estas deben ser la guía para identificar el proceso más adecuado para cada instrumento, e identificar si el instrumento se puede someter a humedad, altas temperaturas
El tema de la trazabilidad también fue abordado como una necesidad para tener el control del procesamiento de los dispositivos médicos desde que pasan por la Central de Esterilización, más tarde en el punto de uso y cuando regresa a la CEyE. La trazabilidad debe de permitir el control a nivel de los paquetes para identificar la relación del instrumental que cada paquete contiene y saber cuando fueron procesados, usados y cuando regresan al punto de reprocesamiento.
En resumen, el 2021 nos hace recordar lo básico, la limpieza y la trazabilidad como el fundamento para asegurar que el procedimiento quirúrgico es seguro para el paciente.
Mejores prácticas de esterilización en la AORN